Las televisiones lo anuncian y lo estamos viendo venir: el próximo invierno va a ser uno de los más duros que se recuerden. Entre la guerra de Ucrania, el Tope al Gas, la inflación de precios… Como se suele decir, va a haber que «apretarse el cinturón». Desde hogar pasivo queremos aportar nuestro granito de arena con una serie de consejos y trucos para que no te llegue una factura de la luz desorbitada.
1. Aislamiento térmico para puertas y ventanas
Una buena parte de la energía que se genera en casa se acaba perdiendo por no tener un buen sistema de aislamiento en puertas y ventanas. Para no perder ese calor, es esencial que todas tus puertas y ventanas con acceso al exterior estén perfectamente protegidas, así que, ¡atiende!
Doble ventana. Es muy importante tener unas ventanas con un vidrio de calidad o con un grosor suficiente como para evitar que se escape el calor. También existe la posibilidad de utilizar doble acristalamiento, de este modo, el sistema de cerramiento es mayor y evita fuga de calor (y también insonoriza, con lo que no tendrás que preocuparte por los ruidos de la calle). Ahora, incluso, también
Burletes. Las puertas de las casas dejan una ligera rendija entre la propia puerta y el marco. Para evitar que, por esa rendija entre el aire frío, es muy habitual utilizar burletes. Es una opción muy accesible ya que es un accesorio que se coloca muy fácilmente y es muy económico. Hay burletes de diferentes materiales como silicona o gomaespuma.
Cortinas térmicas. Una cortina es otro elemento muy recomendable para aislar nuestra casa contra el frío. Colocar una cortina doble, además, durante el día permitirás que pueda pasar la luz, mientras que, durante la noche, evitarás que entre el frío en tu domicilio.
Persianas. Muchos habitantes de otros países se sorprenden cuando llegan a España y ven que, la gran mayoría de hogares utiliza persianas. Sí, persianas de plástico bien duro y aislante que corta el viento y, por lo tanto, también el frío. Esta opción, además de ser otro buen aislante, sirve como elemento de seguridad. Pero acuérdate de subirlas cuando haya sol directo, para permitir que tu casa aumente la temperatura de manera pasiva.
2. Ropa térmica de invierno
En casa también se puede vestir con estilo. Este invierno utiliza ropa calentita para estar por casa. Además de tener un pijama grueso para dormir más a gusto que un arbusto, durante el día también puedes lucir ropa fashion pero confortable para no tener que pasar frío o estar en pijama todo el tiempo como en el confinamiento. ¿Cómo qué? Pues sudaderas, chaquetas con forro polar, camisetas gruesas de algodón… Todo con la mayor calidad y sin preocuparte del frío. Debajo te dejamos una selección de prendas que vas a poder utilizar en invierno.
3. Ropa de cama y sofa
¿Quién te iba a decir que algo tan básico como la ropa de cama o la foma en que abrigues tu sofá iba a afectar al medioambiente? Efectivamente, existen infinidad de tejidos que debes conocer para hacer el cambio de temporada no sólo con tu ropa, en función de si es verano o invierno. En esta ocasión te vamos a preparar para el invierno que nos espera, para que no tengas muchas dificultades a la hora de pasarlo.
Sábanas de invierno
Las sábanas son la primera capa de protección contra el frío en la cama. Elige sábanas de inverno hechas de materiales como la franela o la coralina para que no traspase el frío al colchón.
Edredones
Un buen edredón abriga tu descanso, además de decorar tu cama. Elige un edredón grueso y calentito para no preocuparte por la temperatura.
Mantas calentitas
Un clásico. Las mantas no pasan de moda. Llévate la manta de la cama al sofá y del sofá a la cama. Elige una de un buen material como lana o algodón. Un accesorio de invierno que no falla en ninguna casa. Como alternativa a la manta convencional, puedes utilizar la maravillosa batamanta, que, como su nombre indica, te da la comodidad de una bata y el calor de una manta.
Rellenos nórdicos para el descanso en invierno
Colocar un relleno nórdico en su funda tiene su dificultad, pero una vez que le pillas el truco, te soluciona muchos problemas. Se junta su gran capacidad para que mantener el calor con su peso ligero, que lo hace mucho más manejable. Una gran opción y alternativa al edredón provisional. Relleno de plumón y fibra natural garantizarán tu descanso.
4. Alternativa a los radiadores eléctricos
Aparte de las mantas y edredones, también podemos sustituir los radiadores y el aire acondicionado por otros complementos del hogar que no usen electricidad pero de los que sí puede emanar calor.
Alternativas como bolsas de agua caliente, cojines de semillas o botellas de plástico recicladas te van a hacer ahorrar un dinero en la factura de la luz. Además de eso, también te van a servir para el dolor localizado de articulaciones y para las molestias premenstruales.
5. Ahorrar energía en la cocina
Comer caliente sin necesidad de derrochar energía: puedes ver nuestra propuesta para ahorrar en la cocina.
6. Este invierno, sólo calienta la estancia en la que te encuentras
No calientes la totalidad de tu casa si sólo vas a estar en una estancia. Aprovecha para calentar sólo la zona en la que vas a «hacer vida». No necesitas calentar toda la casa, sino solamente la estancia en la que te encuentras.
7. Tejidos que son más apropiados para el invierno por sus propiedades caloríficas.
Utiliza tejidos apropiados para preservar el calor corporal y, de esta manera, aislar el frío y la humedad. Olvídate de tejidos que se humedecen fácilmente y enfrían el cuerpo. Es preferible utilizar otro algunas de las fibras sintéticas o naturales que te indicamos a continuación.
Los mejores materiales para vestir este invierno
Nylon: Es un tejido muy fino que se utiliza habitualmente en las camisetas térmicas interiores. Es un material fino, que no transpira y nos mantiene el calor.
Poliéster: El poliéster también lo podemos encontrar en muchos tipos de tejidos y ropa interior térmica y deportiva.
Polar: es una prenda que retiene mucho volumen de aire dentro del filamento. Para esto, utiliza tejidos de alta densidad, lo que le otorga un buen aislamiento.
Telas de pelo: Preferiblemente sintético, así no sufre ningún animal, y es más económico. Se encuentra en muchas prendas de abrigo, como las capuchas de los abrigos.
8. Hacer ejercicio en casa
Hacer ejercicio en casa ayuda a elevar tu temperatura corporal y la de tu casa. Te sentirás mejor, más sano, más en forma… ¡y te olvidarás del frío! Es una manera sana y económica de «darte calor», ¡sólo necesitas tu fuerza de voluntad! Pero si necesitas algún material, aquí te dejamos algunas opciones interesantes.
Puedes guiarte con vídeos de youtube, hacer los ejercicios que más te gustan y dedicarle un ratito cada día (o casi, también tienes que descansar de vez en cuando).
Este punto puedes hacerlo también fuera de la temporada de invierno. ¡Es importante mantenerse en buena forma todo el año!
9. Evitar estar sentado o quieto mucho rato: incluso si estudias o tienes que teletrabajar.
Es posible que tengas que pasar mucho tiempo en casa por tu trabajo o por otra serie de circunstancias. Si es tu caso, te recomendamos que utilices una silla ergonómica que te recoja la espalda. Debes saber que es importante no permanecer demasiado tiempo sentado en la misma posición. Ya no sólo para no quedarte helado de frío, sino también porque los músculos se entumecen y puede ser perjudicial para tu salud, sobre todo para tu espalda y piernas.
Por lo tanto, es esencial que, cada cierto tiempo, te des un pequeño paseo, aunque sea dentro de casa, para mover las piernas y entrar en calor. Entra a la cocina a cocinar algo, juega con tu gato un ratito… Te servirá para entrar en calor, desentumecer músculos y, también, para desconectar un momento del trabajo diario.
10. Cambiar las zonas de estudio evitando las ventanas
Sobre todo si éstas no están aisladas o no son eficientes energéticamente hablando. Usar flexos leds o regulables para buscar el mejor nivel lumínico.
